Las Médulas Patrimonio
de la Humanidad

El mejor secreto de Las Médulas está a la vista en todo su mágico paisaje. Considerado uno de los lugares más hermosos del mundo
Además de unas vistas increíbles y unos panorámicos miradores, en Las Médulas podrás disfrutar de uno de los mejores amaneceres y atardeceres de España.
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Las Médulas Patrimonio de la Humanidad

El mejor secreto de Las Médulas está a la vista en todo su mágico paisaje. Considerado uno de los lugares más hermosos del mundo
Además de unas vistas increíbles y unos panorámicos miradores, en Las Médulas podrás disfrutar de uno de los mejores amaneceres y atardeceres de España.
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La belleza del paisaje de Las Médulas reside en una peculiar orografía surgida de la mano humana y la erosión del terreno. La explotación minera desarrollada en Las Médulas por el Imperio romano, hace 2000 años, fue el origen de este entorno único y de ensueño.

Sabes que...

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Organiza tu viaje

Tanto si buscas experiencias de bienestar y relajación, como si prefieres disfrutar con actividades al aire libre o las experiencias cargadas de adrenalina, aquí tienes algunos más destacados para hacer en Las Médulas.

En su avance hacia el occidente de Hispania, entre los años 30 y 40 a.c., Roma extendió sus fronteras hasta la comarca de El Bierzo (León) en busca de minerales necesarios para magnificar su gran obra y acuñar sus monedas. Época que coincide con el inicio del Imperio romano cuando se produjo el cambio del denario de plata al áureo de oro, por lo que este mineral se convirtió en un valor estratégico para Roma. En los depósitos sedimentarios de las montañas que actualmente conforman Las Médulas, los romanos encontraron filones de polvo de oro. Un tesoro oculto que sería el origen de las exóticas figuras que ahora se erigen en el territorio.

Roma, caracterizada por sus notables conocimientos mineros y habilidades técnicas, proyectó sobre el terreno un ingenioso sistema para complementar otras técnicas en la explotación de oro. Se basó en la creación de enormes galerías a través de la inyección de agua en determinadas zonas de las montañas.

«Una obra de gigantes», como lo definió el naturalista y militar romano Plinio el Viejo (23-79 d.C.), que mediante la fuerza hidráulica removió millones de metros cúbicos de tierra en búsqueda de ese preciado oro que después transportarían a las grandes ciudades del Imperio. La extracción de oro de Las Médulas duró alrededor de 200 años, desde finales del siglo 11 al inicio del siglo 111.

El abandono de la explotación minera, por la crisis monetaria del siglo 111 que vivió Roma y el inicio de extracciones más productivas, unido al paso de los milenios, ha convertido a Las Médulas en un paisaje tan singular como valioso. 

Este escenario aúna la extraordinaria huella extractiva a cielo abierto con la hermosa recuperación natural del territorio, hecho por el que Las Médulas mereció ser declarado Bien de Interés Cultural en 1996 y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.

Prepara el equipaje e incluye tu curiosidad exploradora porque te espera uno de los viajes más emocionantes de tu vida. Junto a los recuerdos de un fascinante capítulo de la historia, podrás encontrar sendas y rincones de exuberante naturaleza. Oxígeno para los pulmones y luz para tu mirada. Además de unas vistas increíbles y unos panorámicos miradores, en Las Médulas podrás disfrutar de uno de los mejores amaneceres y atardeceres de España.

Comprobarás que abunda el castaño, un viejo protagonista vegetal de Las Médulas. De grueso y retorcido tronco, el castaño crece robusto repleto de pompones o erizos junto a los robles, y, gracias a su longevidad, es testigo de un viaje en el tiempo. Si hablase, contaría lo que ha ocurrido aquí desde hace siglos. Un árbol originario de Asia que, por cierto, también trajeron los romanos a la península. Aunque ya existía en Las Médulas, la llegada de Roma hizo que se extendiera como cultivo.

Inspiración para tu viaje

Recorre los rincones más emblemáticos de Las Médulas con itinerarios para descubrir los excepcionales valores naturales del territorio y los rasgos culturales.

Recorrer las sendas del Espacio Cultural y Natural de Las Médulas es probablemente la forma más divertida y gratificante de explorar sus paisajes.

Prepárate para visitar todos los que puedas porque guardan rincones de arquitectura tradicional surgida de los materiales del paisaje que los rodea.

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